¿Qué se esconde tras el nuevo Airbnb?

La tecnológica quiere convertirse en una ''súper marca de viajes'' apostando por la calidad de sus nuevos productos

Airbnb no quiere competir con los hoteles, ni con los receptivos, ni con las agencias de viajes. Airbnb quiere competir contra todos ellos, y a la vez. La tecnológica ha presentado este noviembre Trips, la herramienta con la que quiere convertirse en una «súper marca de los viajes» al incorporar al tradicional servicio de alojamientos nuevos guías turísticos, actividades y excursiones.

Así lo explica Chip Conley, director de Hospitalidad y Estrategia de la compañía, en una entrevista concedida a Skift. «Airbnb es un mercado», defiende. «Y como mercado, para expandirnos necesitábamos primar la cantidad, crear un efecto de red», recuerda. «Hasta ahora, teníamos que crecer a nivel mundial en todos los mercados», explica.

Sin embargo, advierte: «Hay un punto en el que la cantidad por sí sola es peligrosa si la calidad no se empareja con ella». Las experiencias deben liderar la apuesta por el producto de la empresa estadounidense. «Todo el conocimiento adquirido en materia de hospitalidad nos está ayudando a la hora de garantizar unos estándares con el nuevo Trips», celebra.

Airbnb aspira a convertirse en «la mejor empresa del sector» gracias a la personalización

La sociedad ha creado un nuevo protocolo de control de calidad para garantizar que huéspedes y anfitriones sean realmente quienes dicen ser y conocer verdaderamente sus intenciones. «Queremos asegurarnos de que los usuarios que participen en las nuevas actividades entiendan las leyes locales y tengan la seguridad en cuenta», predica.

Los propietarios tendrán todavía más información de los clientes. «Creemos que al compartir los datos podrán tener un proceso de evaluación de riesgos y podremos controlar la calidad de una manera más sofisticada», festeja.

Con el nuevo rumbo, Airbnb aspira a convertirse «en la mejor empresa del mundo del sector de los viajes gracias a la personalización y adaptación». «Es la dirección a la que vamos, y cada vez conocemos mejor a nuestros usuarios gracias a las anteriores reservas contratadas», añade.

El próximo campo de batalla de Airbnb: entrar en el sector del transporte

Además, la tecnológica verá como se disparan sus ingresos. Con unos márgenes pírricos en el sector del alojamiento, se llevará una comisión del 20% por cada experiencia en el destino contratada, a excepción de si es organizada por una ONG. Una alternativa a la potencial pérdida de ingresos con la creciente virulencia de varios consistorios de todo el mundo con el negocio tradicional de la compañía.

Pero la expansión de la firma no ha hecho más que empezar: próxima estación, el transporte. «Es una parte importante del viaje, aunque en este momento es una visión más que algo en lo que estemos trabajando realmente ahora», matizan desde la empresa.

a.
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