Matutes controla desde Panamá sus hoteles en República Dominicana
La compañía que gestiona los establecimientos de Palladium en las Antillas pende de una sociedad radicada en Ciudad de Panamá
A Palladium Hotel Group le gusta América. En su expansión internacional, la cadena ha apostado por Brasil, Jamaica, México y República Dominicana para abrir nuevos horizontes en su corporación hotelera. Sin embargo, la compañía creada por el antiguo ministro de Asuntos Exteriores Abel Matutes mece la cuna de los alojamientos desde una sociedad matriz radicada en Panamá, donde no tiene actividad conocida.
Según los datos del Registro Público de Panamá, el empresario y político ibicenco creó la sociedad en 1988, cuando ocupaba el cargo de diputado en las Cortes Generales. Bajo el nombre de Fiesta Bávaro Hotels SA, la empresa se constituyó con un capital de 1.000 dólares y permanece activa pese a que el grupo turístico no dispone de ningún alojamiento en el país casi treinta años después.
[CONSULTA EL DOCUMENTO EXTRAÍDO DEL REGISTRO PÚBLICO DE PANAMÁ]
Al frente está Abel Matutes Prats, hijo del ex ministro y director general de Palladium, con la etiqueta de presidente. El agente residente, imprescindible para constituir una compañía en el país, es el bufete local Patton, Moreno & Asvan, especializado en “desarrollar negocios, establecer corporaciones y fideicomisos o realizar trámites legales en Panamá, en el Caribe y América Central”, explica en su página web.
La filial dominicana
La sociedad, además, es a su vez titular de Fiesta Bavaro Hotels, otra empresa con el mismo nombre pero afincada en República Dominicana. Palladium sí reconoce que la compañía de las Antillas tiene actividad, pues agrupa los cinco hoteles que el grupo balear tiene en el país: El Grand Palladium Bávaro Suites, el Grand Palladium Palace, el Grand Palladium Punta Cana, el The Royal Suits Turquesa y el Dominican Fiesta Hotel.
Según los datos del registro dominicano, la firma se registró en 2006. Su gestor es José Francisco Bonet Gambins, condenado a un año de cárcel y a una multa de 400.00 euros por la construcción ilegal de un edificio promovido por Empresas Matutes en las afueras de Santo Domingo.
Intereses en Panamá
Mientras, un portavoz de la entidad defiende a Cerodosbé que el grupo “tenía la intención de desarrollar un proyecto en Panamá que finalmente no se llevó a cabo”. Pese a la frustrada apertura hace casi tres décadas, “la sociedad no se disolvió a la espera de encontrar el terreno adecuado, el cual seguimos buscando”.
Sí es cierto que Abel Matutes hijo explicó en una entrevista concedida a Cinco Días en 2014 que el grupo tenía interés por posicionarse en países como Panamá. La otra cara de la moneda la publicó el digital El Plural ese mismo año. Según el artículo, el político transfirió a una sociedad de la república presidencialista su paquete de acciones en el Grupo Doliga –una de las firmas de la familia-. Una información que no ha sido desmentida por la compañía.
