El cognac tradicional que rompe los moldes

Se trata de romper mitos. El cognac no tienen por qué disfrutarse en una copa de balón, en un salón oscuro y con una estufa de leños prendidos. Hennessy, una de las marcas más antiguas de destilados, busca que su famosa edición Very Special (VS) se utilice como base de cócteles o que pueda disfrutarse bien frío.

No es fácil que una firma con más de 250 años de historia se aleje de los tópicos tan conservadores que siempre rodearon al cognac. Pero esa imagen de bebida anticuada, más propio de aristócratas en un club inglés, no tiene mucho encaje en el siglo XXI.

Alma de cócteles

Hennessy presentó los cócteles que pueden crearse con la edición Very Special como base. Puede ser el Hennessy Passion (con zumos de mango, fruta de la pasión, piña, lima, soda y una rodaja de piña), el Ginger (con ginger ale) y el Mango Basil Lemonade (con jugo de limón fresco, puré de mango, jarabe simple, soda y una hoja de albahaca).

Este último lo probamos en una degustación en el exclusivo restaurante Rilke, en Barcelona, y se llevaron los aplausos.

Cóctel Hennessy Mango Basil Lemonade.

Una nueva forma de llegar al cognac

Los sabores dulces y suaves abren la puerta a los que siempre miraron a esta bebida con recelo. También es una manera de introducirse en una bebida que, dicen los puristas, se debe beber solo o con hielo, pero los 40º de graduación alcohólica alejan a más de uno.

No se puede calentar el cognac con una pequeña llama: volatiliza el alcohol y arruina la bebida

Cuando se acerca una copa de VS puro en nariz se perciben aromas de almendras recién tostadas y azúcar moreno, seguido por un delicado aroma afrutado a uva.

En tanto, en boca se percibe una intensidad aromática y dimensión de vainilla, con un remate final de exuberancia fresca.

Cóctel Hennessy Ginger.

Aliados inesperados

Según precisa Daniel Sampere, brand ambassador de Hennessy, el tradicional cognac protagoniza un inesperado cambio de imagen gracias a que muchos músicos de rap y hip hop de Estados Unidos son grandes consumidores de esta bebida.

Podríamos pensar que es un sacrilegio lo que hacen en México, que beben al Hennessy mezclado con Coca-Cola. O nos daría lástima que en Japón y otros países de Asia compren grandes lotes de cognac pero no para disfrutarlos, sino para que queden como un legado de herencia entre generaciones.

Cambio de imagen

El Hennessy Very Special ya había tenido un importante cambio de cara cuando hace cuatro años el estudio Pinifarina (el mismo que diseñó varios modelos de Ferrarri) presentó una botella con formas más contemporáneas y asertivas.

Cada tanto, la firma francesa (que pertenece al conglomerado del sector del lujo LVMH) crea ediciones limitadas donde artistas de renombre dan rienda suelta a su talento en la creación de etiquetas.

Cóctel Hennessy Passion.

Ocho generaciones en Cognac

Con ocho generaciones al frente de la producción en la región de Cognac (no muy lejos de Burdeos, al suroeste de Francia), los Hennessy junto con la familia Fillioux siguen elaborando esta bebida con métodos tradicionales, con un assamblage de nueve aguardientes especialmente seleccionados.

Está bien en querer innovar con esta bebida, pero hay límites que no se pueden cruzar. Por ejemplo, advierte Sampere, no hay que calentar la copa antes de beber. “Eso volatiliza al alcohol y perjudica al cognac”, explica. A tenerlo en cuenta.