Fallece el hotelero catalán Jordi Comas en un asalto a su casa

Los empresarios turísticos expresan su consternación ante la muerte violenta

El presidente de la patronal de Girona Foeg y vicepresidente de la patronal catalana Foment del Treball, Jordi Comas, falleció este domingo después de que un grupo de ladrones entraran a su casa en Platja d’Aro (Girona) y lo ataran junto a su esposa.

Comas, un destacado hotelero y promotor turístico catalán, pudo haber muerto por asfixia después de que los atracadores lo vendaran par evitar que gritara, aunque el equipo forense no descarta que Comas haya sufrido un infarto. La policía científica investiga el suceso y se ha decretado el secreto del sumario.

Empresarios consternados

Comas había sido fundador y accionista del patronato de turismo Costa Brava Girona. Desde el año 1976 era consejero del patronato y casi todas las acciones realizadas por la institución llevaron su sello.

“Estamos consternados y muy adoloridos por lo sucedido. A pesar de no tener hijos, y a su edad, era un emprendedor incansable. Acababa de inaugurar un restaurante espectacular en Platja d’Aro. Es un día de luto para el turismo de la zona”, explicó Ramón Ramos, director del Patronato.

Además de la inauguración de su restaurante y marisquería Aradi, Comas trabajado durante los últimos meses en la creación de una bodega.

Precedente

El conocido empresario, que padecía algunos problemas de salud, ya había sido víctima de otro asalto hace apenas 15 días y no ocultó el gran nerviosismo que le produjo encontrar en su casa a un grupo de hombres encapuchados, según informaron a este diario fuentes cercanas a la investigación. Los ladrones huyeron cuando saltaron las alarmas, explican sus allegados.

Zona castigada

Los robos a casas y urbanizaciones en la Costa Brava han sido una constante este verano. Desde entonces se han producido una veintena de robos con violencia en la zona, algunos de ellos con las familias dentro de casa.
La policía ha detenido los últimos meses dos grupos dedicados al robo de viviendas. Uno de ellos, compuesto por ciudadanos italianos y rumanos, fue capturado hace un mes cuando huían con joyas y efectivo de una casa de Roses después de haber sometido y atado a su familia.

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