Sandalio, el acosador de Hidalgo

El pensionista cubano-americano, antiguo marine, persigue al presidente de Globalia en un litigio por unos terrenos de dudosa titularidad. Reclama 1,4 millones al empresario español por una playa en la que el grupo turístico “no ha puesto ni una sombrilla”.

Sandalio Suárez se ha convertido en una pesadilla para Juan José Hidalgo. El presidente de Globalia sufre el acoso de este pensionista cubano-americano desde hace varios años. El motivo es un litigio por unos terrenos cerca de un complejo hotelero en Punta Cana (República Dominicana) de Be Live, cadena hotelera del grupo.

La causa, pese a estar llena de claroscuros e incluso archivada, ya le ha costado un disgusto al empresario español: sobre él pesa una orden de busca y captura en el país caribeño.

¿Dónde nace la obcecación de Sandalio? El pensionista, ex soldado de la Marina de Estados Unidos y actualmente afincado en Miami, asegura que el trozo de playa de 629 metros cuadrados en Cabeza de Toro es suyo.

Apunta que lo adquirió en 1988 por 23.700 pesos dominicanos, unos 400 euros. En su querella, dice tener planes para invertir cinco millones de dólares en esos terrenos para hacer una marina deportiva. Fuentes judiciales consultadas por este medio consideran su historia «absurda», ya que ley dominicana no permite construir a menos de 60 metros del mar.
 

 
El pensionista denuncia que el hotel Be Live utiliza la playa de su propiedad

 
Globalia hace tiempo que tiene constancia de la existencia de Sandalio. La compañía confirma que desde hace siete años ha intentado venderles la parcela. El grupo turístico ha declinado siempre la oferta al no confiar en la validez de la propiedad.

El pensionista ex marine denuncia que el hotel Be Live utiliza la playa de su propiedad. Según fuentes de Globalia, la parcela se encuentra totalmente vacía. No hay ni una sola sombrilla. No obstante, Suárez reclama 1,8 millones de dólares (1,4 millones euros) a Hidalgo.

Un dólar diario por cada metro cuadrado durante los últimos ocho años. Y no sólo eso. También exige una indemnización de veinte millones de dólares (14,5 millones de euros) y acceder a la parcela a través del hotel.

Aliados de dudosa reputación

Suárez se ha aliado con el abogado Andrés P. Cordero Haché. Fuentes judiciales indican que este letrado fue condenado en agosto de 2012 a un año de inhabilitación por mala praxis.

Los mismos interlocutores acusan al letrado de utilizar una estrategia de desgaste. Aplican diversos trucos para conseguir una y otra vez la suspensión de la vista cuando Hidalgo ya viaja desde España. “Incluso Suárez ha faltado a la vista, cuando es el principal interesado”.
 

 
Su abogado fue condenado a un año de inhabilitación por mala praxis

 
Hidalgo ya le ganó una vez la partida a Suárez. El 22 de noviembre de 2012 un tribunal dominicano archivó la causa al no percibir ningún delito por parte de Globalia.

Pero el pensionista insistió una vez más y, con otro magistrado, ha logrado reabrir la misma causa y sumar otra más por injurias, alegando que Hidalgo les insultó. Es por estos dos últimos procesos que la situación se ha complicado.

El juez Andrés Rijo Delgado ha declarado a Hidalgo en rebeldía por no presentarse a un interrogatorio y tras ello ha dictado orden de busca y captura. Fuentes de Globalia indican que el empresario ni siquiera ha recibido la citación en su domicilio.
 

 
Globalia indica que Hidalgo ni siquiera ha recibido la citación en su domicilio

 
La situación se da porque la compañía recibió dos citaciones –una por cada proceso– en la sede de la compañía en Santo Domingo con fecha 3 de diciembre. Una de ellas se dio como no presentada correctamente, por lo que el juez fijó una nueva fecha para la vista, mientras que la otra, idéntica, se dio por buena.

Desde la compañía, se ha mostrado su profundo malestar sobre lo ocurrido. “Hidalgo siempre ha asistido a las citas con la justicia dominicana”, indican. En este sentido, ven la medida dictada por el juez Rijo totalmente desmesurada.

a.
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