Airbnb recaudará la tasa turística en Cataluña

La Generalitat crea la figura del "asistente de recaudación" para que las plataformas tecnológicas liquiden los impuestos de todas la viviendas que anuncian

El culebrón acaricia su fin. El conflicto alrededor de la tributación de los pisos turísticos que tiene en pie de guerra a los hoteleros de medio mundo se tiñe de rosa en Cataluña. En los primeros presupuestos que saca adelante Junts pel Sí, el vicepresidente económico de la Generalitat, Oriol Junqueras, incluirá un impuesto para todos los alojamientos de uso turístico, que entrará en vigor el próximo 1 de abril.

Así, el gobierno catalán aplicará a todas las viviendas la tasa turística en la ley de acompañamiento, que será de 2,25 euros por persona y noche en Barcelona y 0,90 euros para el resto del territorio. Además, se considerará a empresas como Airbnb «asistentes de recaudación», por lo que deberán pagar el canon de las reservas que gestionen  –ya sean de establecimientos con o sin licencia– para luego liquidarlas con los propietarios de manera semestral, explican fuentes de la Generalitat.

De este modo se cumple una de las demandas de la compañía tecnológica, que ya aplica modelos similares en Ámsterdam, Lisboa, París y otras 19 ciudades francesas. Con ella, la administración aspira a recaudar unos 50 millones de euros anuales, siete más de los que percibe ahora.

El secretario de Hacienda del Govern, Lluís Salvadó, desvela que parte de la recaudación procedente de la tasa se dedicará a la inspección y el control de viviendas irregulares en las zonas más conflictivas de Barcelona, como Ciutat Vella o la Barceloneta.

Los cruceristas que no duerman en la ciudad deberán pagar 0,65 euros

No será el único cambio en materia turística. Otra de las grandes demandas del Ayuntamiento de Barcelona también será escuchada: los cruceristas que no pernocten en la ciudad también deberán pagar. Hasta ahora exentos, las embarcaciones que pasen menos de 12 horas en la capital mediterránea tendrán que tributar hasta 0,65 euros por persona y noche. Mientras, las naves que sirvan para dormir en El Port mantendrán su tributo en 2,25 euros.

Si bien el texto reflejará dos de las grandes peticiones de Ada Colau, el amor no ha sido correspondido a la hora de gravar a los hoteleros con una tasa más alta. Como explicaron fuentes municipales a Cerodosbé, el impuesto se puso a debate en la mesa de negociación que ambas administraciones mantienen. La ley de acompañamiento de los presupuestos era la vía preferida de los representantes de Barcelona en Comú para incluir la medida.

«Hay que tener en cuenta que la tasa turística que pagan los hoteleros es de las más bajas de Europa«, recordaban hace tres semanas. La compensación en la ciudad oscila desde los 0,45 euros por persona y noche para los hoteles de hasta tres estrellas, 1,10 euros para los cuatro estrellas y cuatro estrellas superior y 2,25 euros para los cinco estrellas y de gran lujo. 

La tasa turística hotelera es más baja en BCN que en las grandes capitales de Europa

En cambio, en Ámsterdam Berlín, la tasa es del 5% de la tarifa final que se abona en el hotel. Una cantidad que se destina a mejorar la ciudad y sus servicios. En París la cantidad llega hasta los 1,5 euros excepto en las habitaciones con un coste superior a los 200 euros, que gravan el 2% de su coste.

Mientras, Italia ofrece una amalgama de distintas soluciones: en Florencia y Venecia se paga un euro por cada estrella del establecimiento y, en Roma tres euros en los hoteles de gama alta y dos euros en los de tres estrellas o menos. El impuesto llega incluso a los Estados Unidos. En Nueva York la tasa ronda los tres dólares por noche y habitación. Otros países aplican un impuesto de entre el 5% y el 7,25% de la tarifa de la estancia total.

 

a.
Ahora en portada