Las grandes cadenas no se amilanan ante el ‘muro hotelero’ de Colau

Son Kempinsky, Marriott o Four Seasons. Las cadenas hoteleras peinan Barcelona en busca de propiedades 'premium' pese a la suspensión de licencias turísticas que decretó Ada Colau en julio. Un verano de récord estimula el hambre de inversión.

«Un hotel bien gestionado en Barcelona es una máquina de hacer dinero«. La frase es de Anna Gener, directora general de Aguirre Newman en Barcelona. La ejecutiva consigna una tendencia: la ‘Marca Barcelona’ aguanta a la polémica suspensión de licencias hoteleras que levantó el gobierno de Ada Colau en julio. Parte del éxito, además de la golosa enseña, es un verano turístico de récord

«Notificamos aumentos del 10% de ingresos. En precio medio, Barcelona se acerca paulatinamente a París», indicó un directivo hotelero en un almuerzo organizado por Magma Hospitality esta semana.

En este escenario, las cadenas siguen buscando edificios en Barcelona, aunque, puntualiza Gener, «evitan el riesgo urbanístico«. 

Fuera de la ciudad, no

Una opinión similar expresa Javier de Villanueva, consultor senior en inversión hotelera de Jones Lang Lasalle. «La ‘Marca Barcelona’ continúa siendo la más potente de España. Cuando inviertes en un destino, tienes un modelo. La moratoria de licencias penaliza parte de ese modelo», explica. 

Los dos expertos consultados coinciden en una tendencia: el ‘parón’ de licencias de alojamientos turísticos en Barcelona no beneficia a las poblaciones limítrofes, como se había apuntado inicialmente. «El turista quiere localización. Estar céntrico. Las cadenas lo saben y por ello buscan inmuebles en el corazón de la ciudad», valoran.

Zonificación 

De hecho, las cadenas hoteleras consultadas consideran que la prohibición de nuevas aperturas se acabará zonificando. «Estamos en un momento de ‘impasse’. La moratoria fue leída como un golpe de autoridad de la alcaldesa. Pero la pérdida de votaciones en las comisiones y los acontecimientos recientes apuntan a que se actuará por áreas», apunta un directivo de una firma española.

Anna Gener coincide con el análisis. «Es pronto, pero se debería actuar sólo en las zonas saturadas. Si alguien quiere invertir en un youth hostel en un distrito poco turístico como Nou Barris, ¿por qué no debería hacerlo?», concluye.

a.
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