Los asesores del gobierno catalán discrepan de la tasa turística

Un estudio público cuestiona la futura gestión de los 50 millones anuales de recaudación

El Consell de Treball Econòmic i Social de Catalunya (CTESC) –organismo público catalán asesor de la Generalitat– ha emitido un informe que cuestiona la comisión gestora del fondo creado a partir de la tasa turística catalana. Entre sus críticas, el análisis indica que la composición del organismo no es equilibrada entre empresas, trabajadores y administración.

El CTESC no considera adecuada la composición de la comisión gestora regulada que «debería garantizar una composición más equilibrada entre las administraciones y el sector turístico». Además, afirma que la composición establecida debería recoger una paridad entre empresarios y trabajadores entre las organizaciones más representativas. El organismo indica que los representantes del sector privado designados por la persona competente en materia de turismo debería ser a propuesta de les organizaciones empresariales más representativas en el ámbito de Catalunya.

Puesta en marcha

La puesta en marcha de la tasa este 1 de noviembre se ha realizado sin contar con el apoyo del sector. De hecho, el nuevo impuesto sólo ha contado con el respaldo de CiU en su ratificación. La principal crítica que se ha encontrado por parte de la oposición es que la recaudación se ha visto drásticamente reducida. En un primer momento se estimó que el impuesto lograría un fondo de 100 millones de euros. Sin embargo, tras la subida del IVA se recaudará menos ya que el Govern ha decidido que ese aumento no recaiga directamente en el consumidor. De este modo, la previsión del ejecutivo catalán apunta ahora a los 50 millones de euros.

Dudas sobre el funcionamiento

La tasa funciona mediante un impuesto que deberán abonar todas las personas mayores de 16 años que se alojen en un establecimiento turístico catalán. En Barcelona, los hoteles de cinco estrellas y cruceros deberán facturar a sus clientes 2,5 euros por noche; los hoteles de cuatro, 1,25 euros y en el resto de establecimientos, 0,75 euros; mientras que en el resto de Catalunya los hoteles de cinco estrellas y cruceros abonarán 2,5 euros, los hoteles de cuatro estrellas 1 euro, y en el resto de locales 0,5 euros.

Al recaudar más, la capital catalana recibirá el 34% de la tasa turística, y la mitad será para promoción que realice Turisme de Barcelona y la otra para fomentar el turismo responsable, protección del patrimonio y la mejora de la calidad de vida en las zonas con más visitantes.

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