El puerto de Hamburgo se convierte en un elegante paseo con anfiteatro

Hamburgo no descansa. Al proyecto urbanístico del barrio de HafenCity se suma la presentación de las nuevas defensas costeras del puerto. Diseñadas como anfiteatros, combina la protección de la ciudad ante las mareas con nuevos espacios públicos para los residentes.

En el 2006 el ayuntamiento de Hamburgo llamó a un concurso para renovar uno de los tramos en los 7,2 kilómetros de las barreras protectoras en la zona de Niederhafen, el sector del río Elba que va desde St Pauli Landungsbrücken y Baumwall.

Nueva defensa costera

Este segmento de 625 metros, no muy lejos de la Filarmónica de Hamburgo, fue rediseñado por el estudio de Zaha Hadid.

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La cara oriental se eleva a 8,60 metros sobre el nivel del mar y la occidental sube unos 30 centímetros más. En el medio se despliega una explanada que en sus partes más angostas llega a los 10 metros de ancho.

Los anfiteatros sobre el río

En varios sectores la plataforma desciende suavemente de manera escalonada, convirtiendo al paseo en un anfiteatro desde donde se pueden ver las embarcaciones de recreo y los gigantescos barcos que transportan contenedores por el río Elba.

A lo largo del paseo una serie de escalones se convierten en anfiteatros que regalan vistas panorámicas del puerto

Allí se construyó un restaurante de tres pisos, dos kioscos que venden comida para llevar y varios comercios. Las presencias de músicos y otros artistas callejeros dan una nueva vitalidad a este sector del puerto.

Un nuevo restaurante de tres pisos mejora la oferta gastronómica del lugar. Foto: Piet Niemann.

Integración con la ciudad

Una serie de nuevos puentes peatonales conectan al paseo con las calles laterales. Además una ciclovía rodea a la estructura para integrarla a la flamante estructura.

El sector que da hacia el oeste es el que despliega las vistas panorámicas más atractivas del puerto, mientras que el que da al este, que mira al puerto deportivo, ofrece una atmósfera más íntima con una rampa que permite a los paseantes llegar hasta la orilla del agua.

Freno a un problema periódico

Las crecidas del agua fueron un problema que castigaba periódicamente a Hamburgo. En 1962 una marejada causó 315 muertes y la destrucción de 60.000 viviendas.

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Para domesticar las crecidas la ciudad construyó 78 kilómetros de diques, con un sistema de compuertas, barreras y estaciones de bombeo, que pudieron lograr la convivencia con el río.

La nueva pasarela tiene 625 metros de largo. Foto: Piet Niemann.

Pero en el 2006 se detectó que los soportes de la estructura sufrían de sobrecarga y que era necesario reforzar los cimientos.

Hamburgo se renueva

La nueva pasarela se suma a las renovaciones que la ciudad emprendió en el barrio de HafenCity, un proyecto para cambiar la cara de 240 hectáreas que cambia la cara del sector que mira al puerto.

Su mascarón de proa es la majestuosa Filarmónica, que fue diseñada por el estudio Herzog & De Meuron. La llegada de nuevos hoteles, restaurantes y museos en las instalaciones de los antiguos almacenes y depósitos portuarios convirtieron a este proyecto urbanístico en el más ambicioso de Europa.