El turismo tiembla: el negocio de ‘la noche’ al límite

El sector turístico tiembla. El sector de la noche –una pieza fundamental para el modelo sol y playa– está al límite. La decisión del Gobierno de reducir el IVA del 21% al 10% para las obras de artes y las manifestaciones artísticas de las fiestas populares –como las Fallas o las Hogueras de San Juan– ha reabierto el debate sobre el IVA cultural en el ocio y la música, que reclama un trato igualitario.
      

 
«La decadencia del ocio va a tener efectos inmediatos sobre nuestro atractivo turístico porque los turistas quieren venir a España a disfrutar, y cada vez será más difícil encontrar locales de ocio con la presión a la que se ven sometidos», asegura el portavoz de ProNoche, Vicente Pizcueta, en una entrevista con Europa Press.

La mayoría de las empresas de ocio y locales de música reconoce que están perdiendo dinero «a manos llenas». Desde el inicio de la crisis, uno de cada cinco locales de ocio y salas de conciertos en España ha echado el cierre –unas 4.500 empresas– con una caída del volumen de facturación del 6.000 millones de euros y la pérdida de cerca de 30.000 empleos de un colectivo cuya edad media es de 27 años.

Aunque la plataforma Salvemos la música y la Noche valora positivamente la decisión del Gobierno, pide que se aborde una modificación global del IVA cultural para impedir «la ruina y la destrucción de sectores y actividades tan importantes como son la música, el ocio y los espectáculos».

Esta reducción de la presión fiscal en obras de arte y fiestas es considerada por la plataforma como un manifiesto de la necesidad de modificar la presión fiscal sobre toda la actividad cultural y artística del país «que está provocando el desplome y la ruina de este tipo de actividad económica y social».
      

 
La Plataforma cree necesario denunciar los «prejuicios culturales» de la medida aprobada que, en su opinión, pone de manifiesto el «agravio comparativo, la parcialidad y el electoralismo populista» de una decisión política que «favorece la visión más elitista de la producción artística», y al tiempo, el tirón de las fiestas y tradiciones populares, «dando la espalda otras manifestaciones culturales como son la música el ocio y las actividades recreativas».

La agrupación en la que participan la Alianza empresarial por el ocio y el turismo (ProNoche), la Asociación Estatal de Salas de Música en directo (ACCES), La noche en vivo (Asociación de Salas de Música en Directo en Madrid), y la Asociación de Salas de Conciertos de Catañuña (ASACC), considera que los locales de ocio y los espectáculos musicales tienen un vocación turística innegable por lo que deben ser apoyados desde el Gobierno ya que son fuente de ingresos, de creación de empleo y de atractivo turístico.