Diez locales de moda en la nueva milla de oro de Madrid

La calle Jorge Juan es la nueva meca de los buscadores de tendencias y amantes de la cocina de vanguardia

Cada ciudad tiene sus barrios clásicos, los que destilan un aire aristócrata, y aquellos que lideran las tendencias gastronómicas, de moda y diseño. En el caso de Madrid, el Distrito 41 es el nuevo barrio de moda y la calle Jorge Juan, la nueva milla de oro donde los madrileños y visitantes pasean para ver y ser vistos, subir fotos a Instagram y celebrar nuevos descubrimientos en cada esquina.

En el barrio de Salamanca, el Distrito 41 cuenta con unos 1.500 locales comerciales, pero de ellos una treintena han sumado fuerzas dar nuevas energías a estas elegantes calles y organizar eventos como las Noches de San Jorge Juan, o los mercados de las flores de Navidad y Primavera.

La elección de los lugares de moda no es fácil, pero ninguna persona que quiera conocer o volver a este distrito debería dejar de comer o cenar en estos lugares:

Amazónico

Diseñado por el interiorista Lázaro Rosa-Violán, Amazónico presenta una decoración envolvente como si se estuviera en un rincón de la gigantesca selva brasilera. Pero sus platos tienen voluntad internacional, que pueden tener orígenes japoneses, indios, chinos y sudamericanos. Un imperdible son los ciclos de jazz que se organizan en su planta baja.

La Bien Aparecida

Este es el tercer restaurante de Paco Quirós, y La Bien Aparecida, con una presentación que mezcla conceptos tradicionales con vanguardistas. Entre sus platos recomendados están las tradiciones cántabras de guisos, arroces, pescados y carnes, aunque presentaciones como la flor de alcachofa con migas de novilla guisada se llevan los aplausos.

La Máquina de Jorge Juan

Inaugurado en 2015, La Máquina de Jorge Juan se encuentra en un palacete de cuatro plantas, donde es famosa su gran barra elíptica que da hacia la calle. Entre sus platos más exclusivos brillan las ostras, la ensaladilla rusa La Máquina, el bacalao dorado y los callos a la moda de Oviedo.

Pastelería Mallorca

El tiempo no pasa en la clásica Pastelería Mallorca: abierto en 1931, es un clásico del barrio de Salamanca, con dulces y salados de primera calidad, como la barrita de tortilla de patata, el mini rollito, el croissant parisien, los mini fritos, la tarta de chocolate al 70% con nueces de pecán, los macarones y los infaltables buñuelos y pasteles.

Taberna Los Gallos

En una pequeña casa del callejón de Puigcerdá, la Taberna Los Gallos presenta cinco zonas bien diferenciadas, como la terraza, la azotea en plan chill out, el sector de la entrada coronado por la barra de mármol, el salón comedor de la planta principal y la bodega que explota de color. Las croquetas de espinaca, la bechamel, los huevos rotos, el salmorejo, las ensaladas clásicas, el guiso del día y las papas arrugás son algunos de los platos que siempre agradecen sus comensales.

Lux Madrid

Lux Madrid, la ambiciosa apuesta del grupo La Máquina, despliega sus propuestas en una casa señorial de principios del siglo XX. Su ambiente reservado y discreto contrasta con la variedad de platos y recetas de las cocinas española, asiática, italiana y mexicana.

Mamá Framboise

La pastelería Mamá Framboise, que recuerda al Nueva York de los años 20, es un templo de la alta pastelería, producto del cariño que el chef pastelero Alejandro Montes pone en cada creación. Imposible decidirse por uno de sus dulces, entre los croissant de almendra, chocolate o frambuesa, el pain au chocolat o el tradicional schnecke.

Ultramarinos Quintín

Ultramarinos Quintín es un estupendo bar y restaurante en el que disfrutar a lo largo de todo el día de su excelente cocina tradicional en un ambiente muy chic y relajado. Para destacar, la lasaña de puerros y alcachofas, la fabada asturiana, la pizza de Pitu Caleya y la ensalada de quinoa.

Babelia Café

Los tres comedores de Babelia Café, de moderno aire minimalista, despliega platos inspirados en las cocinas de México, Líbano, Italia, Francia y, por supuesto, España. Así el chef Xavi Marco Cobas presenta creaciones como la lasaña Babelia de cebón gallego, el perrito caliente de bogavante y los boquerones a la andaluza con panko y curry.

El Paraguas

En sus salones, elegantes y acogedores, se suelen encontrar políticos, empresarios y turistas de alto poder adquisitivo. En El Paraguas, las creaciones del chef Sandro Silva homenajea a la tradición gastronómica asturiana, como las fabes con centollo o las patatas con langostinos fritos de Pixín con salsa de chipirones.

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