La tapa: un clásico que se viste de modernidad

¿Qué es tapear? Según la RAE es “tomar tapas en bares y tabernas de manera itinerante”. Para el chef Daniel Rueda es algo más, se trata “de compartir no solo la comida, sino también la charla y la amistad”. Bajo este concepto la editorial Beta presenta Tapeo, donde este cocinero presenta las creaciones que le hicieron famoso en el panorama gastronómico barcelonés.

Rueda, a pesar de su juventud, es un viejo conocido en la ruta de las tapas más elaboradas de Barcelona. Tras su paso por el Hotel Méridien de Las Ramblas, el premiado con Michelin La Dama y una larga temporada en Sudamérica regresó a Barcelona para ayudar a forjar Tapas 24, la apuesta de Carlos Abellán que redefinió al tradicional platillo español en la ciudad condal.

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En aquel restaurante, dice Rueda, “descubrí la cocina que me gusta, la de toda la vida con un toque actual”. Esa receta de tradición y modernidad la aplicó en su primer vuelo en solitario, el Tapeo de la calle Montcada, rodeado de palacios de la burguesía medieval que acogen selectos restaurantes y museos como el Picasso.

Daniel Rueda, al frente del Tapeo en la calle Montcada.

Mezcla de clásico y moderno

Allí dio un nuevo giro al concepto que rodea a esta preparación que sirve tanto para engañar al estómago antes de la comida como para satisfacerlo sin necesidad de llegar a platos mayores.

“Una tapa tiene que destacar por su sabor, originalidad y calidad”, sintetiza Daniel Rueda

“Una tapa es sublime por su sabor, su originalidad y su calidad. Si tiene sabor, la tapa barre. Su originalidad crea sorpresa y la calidad es básica en el producto que se ofrece”, precisa este cocinero, que escapa a la exposición mediática: “un bar de tapas ha de ser popular”, sentencia.

Vista del nuevo Tapeo en el barrio de Gràcia.

En el Tapeo de Montcada se hizo famoso con las pantagruélicas costillas de cerdo a la miel y mostaza (cada mes despacha 600 kilos de costillares) y por los puerros confitados, a pesar que reconoce que las verduras se le resisten.

Una nueva oportunidad para las tapas

En Gràcia abrió un segundo Tapeo, a pocos metros de la plaza del Diamante, un afluente del río de residentes, turistas, hipsters, exploradores urbanos y vecinos de toda la vida que transita por este barrio de Barcelona, un sitio de bohemia local y atracción internacional que mantiene vigente su ritmo.

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Algunas de sus creaciones más célebres se convirtieron en letra impresa en el Tapeo by Daniel Rueda, la mezcla de pequeña biografía y recetario de sus tapas que, como si fuera una libreta Moleskine, permite marcar el platillo favorito para pedirlo en la barra o animarse a prepararlo en casa.

Fideuá negra, una clásica preparación mediterránea reinventada.

Las mejores tapas reveladas

Rueda no esconde nada al público, por eso da precisos detalles de cómo preparar tapas como el meloso de cordero, el magret de pato curado y asado con puré de berenjenas y pera, el puerro confitado con olivada, la sepia salteada con alcachofas, la costilla de cerdo ibérico a la miel y mostaza o las papas aliñadas con salmón y wasabi. Así en un total de diez creaciones.

Daniel Rueda acerca sus tapas más célebres en un libro pensado para llevar encima.

Este es el segundo libro de la colección Foodie Friends, nacida de un grupo de personas amantes de la gastronomía y que recorren kilómetros de España en búsqueda de sitios, recetas, creaciones y sorpresas culinarias que valgan la pena descubrir. Tapeo by Daniel Rueda es uno de ellos.