Kalorama, el nuevo barrio de los Obama

Además del expresidente, la hija de Trump residirá en la elegante urbanización a pocos kilómetros del centro de Washington

En una loma de Washington, rodeado de establecimientos rurales, en 1807 el poeta Joel Barlow decidió construir su casa. Impactado por las vistas de los alrededores, buscó inspiración en la literatura griega y bautizó al lugar como Kalorama, que en lengua helénica significa “vistas bonitas”.

Es cierto, en Kalorama se ven las serranías y una franja del Potomac que rodean a este barrio a tres kilómetros del centro de la capital estadounidense. Pero este barrio no es noticia por su orografía, sino porque allí viven desde este sábado Barack y Michelle Obama, tras haber dejado el poder a Donald Trump.

No en vano a Kalorama se lo conoce como el barrio de los poderosos. Además de las 28 embajadas que se encuentran aquí, en sus casas de diseño clásico y de discreta pomposidad residen senadores, congresistas, acaudalados industriales e inversores. Para hacer lobby no hace falta bajar al Capitolio, basta cruzar un par de calles y sentarse en uno de los pequeños cafés del barrio.

Los Obama alquilarán una casa valuada en cinco millones de dólares. Construida en 1920, en sus 800 metros cuadrados se despliegan nueve habitaciones, ocho baños, jardines, terrazas, un garaje para diez coches, y elegantes terminaciones como pisos de madera y paredes de mármol. Estos días, los vecinos dieron una silenciosa aprobación al movimiento de camiones de mudanza y la instalación de garitas de seguridad.

Esta no será su residencia permanente: el expresidente vivirá allí mientras su hija menor Sasha termine el liceo en un afamado colegio de Washington. La otra hija, Malia, ya terminó sus estudios el año pasado e ingresará a Harvard en el 2018, luego de terminar su año sabático entre viajes y actividades sociales. Cuando termine esta etapa, la familia piensa regresar a Chicago.

Casa Ivanka Trump

La hija de Trump será vecina de los Obama

A dos cuadras, otra poderosa familia ha asentado sus reales. Ivanka Trump, una de las hijas del nuevo presidente, vivirá con su marido Jared Kushner, un acaudalado empresario inmobiliario que ahora será asesor especial en la Casa Blanca.

La residencia de esta familia es un poco más pequeña que la de los Obama: tiene 600 metros cuadrados, seis baños, y su decoración es más elegante y sobria que el estilo de nuevo rico, con dorados y mármoles, que caracterizaban al estilo de los Trump.

Esta mansión, de 94 años de antigüedad, tiene un valor de 5,5 millones de dólares, y la familia ha valorado que esté cerca de una de las sinagogas más grandes de la ciudad: Kushner es judío ortodoxo, y su esposa adoptó la religión judía para poder casarse.

Casa Jeff Bezos

Jeff Bezos compró la casa más grande del barrio (y la ciudad)

Pero la casa más grande del barrio, y más bien de Washington –exceptuando la Casa Blanca, claro- es la de Jeff Bezos. El fundador de Amazon pagó 23 millones de dólares por una fastuosa casa de ladrillos que acogía al Museo Textil de la ciudad, que será remodelada para cuando visite la ciudad, ya que su residencia habitual es en Seattle, en el otro extremo de país.

Así Kalorama mantiene su centenaria tradición de ser hogar de expresidentes: Woodrow Wilson, William H. Taft, Franklin Delano Roosevelt, Warren Harding y Herbert Hoover han vivido entre sus calles de poco tránsito y frondosa arboleda.

Los residentes de este barrio saben que, a cambio de aceptar algunas incomodidades por tanta seguridad y movimientos de coches del Servicio Secreto, la llegada de dos familias poderosas impulsan la valorización de sus mansiones. Ellos saben que vivir cerca del poder siempre es buen negocio.

a.
Ahora en portada