Seis perlas de Israel que escapan al radar turístico

Además de los conocidos atractivos de Jerusalén o Tel Aviv, en la pequeña geografía de Israel hay rincones que escapan a la mayoría de los visitantes

El turismo histórico y religioso de Jerusalén, así como la sofisticación de Tel Aviv, son algunos de los atractivos tradicionales de Israel. También lo es su variada geografía que se distribuye en uno de los países más pequeños de Oriente Medio. Pero también hay ciudades y regiones casi desconocidas para el visitante.

Reserva de iris en Netanya

A 32 kilómetros al norte de Tel Aviv se encuentra Netanya, una ciudad de la costa que también atesora un enclave de naturaleza privilegiado. Se trata de la Reserva de Iris, uno de los únicos dos espacios de Israel que preservan la flor autóctona Iris atropurpurea.

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Esta especie se caracteriza por tener unos pétalos que oscilan entre varias tonalidades de morado y granate. La planta florece durante el primer trimestre del año, y en esos momentos se convierte en un colorido espectáculo para la vista y el resto de los sentidos, que realza el potencial estético de esta ciudad.

Iris Reserve
Florecimiento de la Iris atropurpurea, la flor nacional de Israel. Foto: Turismo de Israel.

Safed, la cuarta ciudad santa

El municipio de Safed es junto a Jerusalén, Nazaret y Tiberias una ciudad santa de Israel. Conocida como Tzfat en lengua hebrea, destaca por su historia religiosa: fue allí donde la escuela de pensamiento de judaísmo jasídico alcanzó una popularidad significativa.

Safed tiene numerosos atractivos históricos desconocidos para los visitantes que llegan a Israel

Safed tiene un aspecto pintoresco, llena de rincones para guardar en la retina. Los visitantes lo tienen fácil para perderse en más de una decena de lugares históricos como el cementerio de la ciudad, las Grandes Escaleras o la plaza de los Defensores.

Safed es la cuarta ciudad sagrada de Israel. Foto: Webs that sell - Flickr.
Tranquilidad provinciana en Safed. Foto: Webs that sell – Flickr.

Safed-Tzfat cuenta, además, con la curiosidad de ser la ciudad más alta de Israel sobre el nivel del mar.

Darom Adom: la magia de ver florecer el desierto

La árida región del Negev, que ocupa el 60% del territorio de Israel, es uno de los grandes atractivos del país gracias al turismo activo. Pero, además, cuenta con otras sorpresas para los visitantes y también para los nativos, como es el caso del Darom Adom.

Darom Adom   atribuir a Zachi Evenor
El desierto del Neguev se convierte en un prado rojo. Foto: Zachi Evenor. 

Cada año en el norte del desierto, que es la demarcación verde de la zona, tiene lugar el florecimiento de la anémona, una flor de pétalos rojos que llena el Néguev de color y naturaleza. El acontecimiento es tan especial que se ha organizado el festival Darom Adom durante la época de la floración, cuya próxima edición será en febrero de 2020.

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En este evento se pueden encontrar mercados de agricultores, participar en carreras en bicicleta o disfrutar de representaciones artísticas con unas vistas magníficas al inusual acontecimiento de ver florecer el desierto.

Tel Megido: la joya arqueológica del valle de Jerzeel

En la Baja Galilea, concretamente en el valle Jerzeel, se encuentra el Parque Nacional de Tel Megido, declarado Patrimonio de la Humanidad. A 20 kilómetros de Nazaret, esta zona es una joya para los viajeros religiosos y para los amantes de la historia y la arqueología.

Tel Megiddo
Yacimiento de Tel Megido. Foto: Turismo de Israel.

Los amantes del turismo histórico y arqueológico deberían realizar una visita al Parque Nacional de Tel Megido

Con un pasado milenario, el parque presenta 26 capas de asentamientos – hasta ahora se han identificado las cuatro primeras – y se han registrado restos arqueológicos como una fortaleza egipcia, restos de la Puerta de Salomón (siglo X a.C.), un tesoro de Canaán y un sistema hidráulico de la Edad de Hierro.

Un paseo por la historia en los baños de Acre

Cercana a la bahía de Haifa, la ciudad de Acre (Akko en hebreo) conserva una construcción de tres siglos de historia: los baños turcos Hamam al-Basha, una visita imprescindible en esta pequeña urbe del norte.

Baños turcos
Baños turcos de Acre. Foto: Turismo de Israel.

La edificación es uno de los símbolos de la transformación de Acre, que pasó de ser una ciudad ‘marinera’ a ser una urbe abierta al comercio. La visita recorre las tres partes:

El patio de los baños, que era la zona que se usaba como vestuario; las salas intermedias, donde principalmente se realizaban los tratamientos cosméticos, masajes, celebraciones y las preparaciones para partos. Y la sala caliente, en el epicentro del edificio, que incorporaba el baño de agua caliente, la sala de vapor y la sauna.

Belleza entre montañas de agua salada

En la zona de la costa de Galilea se encuentra Rosh Hanikra, una playa que se fusiona con la montaña con unas grutas y formaciones de roca espectaculares. De hecho, estas cuevas integran la red de 60 Parques Nacionales de Israel.

Rosh   atribuir a sunshinecity
Las extrañas cuevas de Rosh Hanikra. Foto: Sunshinecity.

El parque permite descubrirlo en teleférico, a pie o en bicicleta. También cuenta con una sala audiovisual que se adentra en su pasado y en la flora y la fauna que habitan en el lugar.

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