Seis pueblos fantasma que provocan tanto asombro como temor

Ciudades destruidas en tiempos de guerra y pueblos industriales abandonados conforman un inquietante 'mapamundi fantasma'

Los seres humanos se han asentado en miles de sitios para luego abandonarlos en busca de mejores coordenadas o condiciones. Este ha sido un común denominador en la antropología, pero con los avances de la civilización los catedráticos también han dado cuenta de otro concepto: los pueblos fantasma.

Ejemplos los hay en todos los continentes. Se trata de pueblos, aldeas o ciudades que, por la razón que fuere, terminaron abandonados y generando temor en quien los visita por la soledad y el misterio que emanan de sus caminos.

Las razones del abandono pueden ser muchas: desde conflictos bélicos que destruyeron las edificaciones sin posibilidad de recuperación, hasta asentamientos industriales que luego de clausurados se trajeron abajo la economía de un pueblo y, con ello, lo vaciaron de sus habitantes.

Repasamos seis casos de pueblos fantasma que pueden provocar tanto asombro y alucinación como temor e incomodidad.

6 Isla de Hashima -- Japón

Habitada entre 1887 y 1974 por los trabajadores de una mina de carbón y sus familias, la isla de Hashima mide apenas 480 metros de largo y 150 metros de ancho. Es considerada un Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, pero tras más de cuatro décadas de abandono su daño estructural es vasto.

Hashima, su nombre, significa "acorazado", pues la isla está amurallada para protegerla del oleaje y los tifones. Pero el paso del tiempo ha sido hóstil sobre sus estructuras, como quedó demostrado en el programa de televisión La vida sin humanos, de The History Channel, filmado en la isla.

5 Humberstone y Santa Laura -- Chile

Humberstone y Santa Laura fueron dos oficinas salitreras de Chile. Se conocía por este nombre a los centros de explotación del salitre en el desierto de Atacama del país sudamericano. Humberstone y Santa Laura fueron las oficinas más populares de Chile, pero una crisis de mediados del siglo XX provocó el cierre de ambas en la década de 1960.

Hoy, son pueblos fantasma que de cierta forma congelaron aquel momento de la historia industrial del cono sur americano. Sus edificios y casas, con un deterioro visible, atraen a miles de turistas por año y llaman la atención por los materiales utilizados para su construcción (como los edificios de pino obregón), que reflejan la prosperidad que vivía la región en aquella época.

4 St. Elmo -- Estados Unidos

Un terrible incendio cambió el destino de St. Elmo para siempre. El pueblo, ubicado en Colorado, se inauguró en 1878, dos años antes del hallazgo de minas de plata en las cercanías. Las minas fueron explotadas rápidamente y tan temprano como 1881 el ferrocarril ya llegaba a sus coordenadas.

Pero el éxito no duró mucho: en 1890 un incendio destruyó todo el comercio y dio pie a un descenso poblacional que nunca mermó. Las minas cerraron en 1910 y dos décadas más tarde el pueblo había pasado de 2.000 habitantes a… siete. St. Elmo oficialmente cerró en 1952, cuando se clausuró su oficina postal.

3 Pyramiden -- Noruega

Un asentamiento que en algún momento fue autosuficiente y que contó con hasta 1.000 habitantes ahora tiene, a lo sumo, una decena de pobladores en el verano. Pyramiden fue una minería de carbon de dueños soviéticos ubicada en Noruega, la cual fue fundada en 1910 y abandonada en 1998.

En los últimos diez años las autoridades han intentado convertirla en una zona turística, pero desde el cierre de la mina se conoce su estado de abandono total: se estima que durante el invierno vive allí tan sólo una persona, cifra que se multiplica por diez cuando llega el calor.

2 Herculano -- Italia

La erupción del Vesubio en el año 79 d.C. acabó en minutos con la vida de todos los pobladores de Herculano, una ciudad histórica italiana que incluso fue más rica que la vecina Pompeya, también víctima del ardor del cráter. Sus ruinas hoy son el recuerdo arqueológico de una parte de la humanidad rendida ante la naturaleza hace casi dos milenios.

Herculano fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 1997, pero desde el siglo XIX ya empezaron a realizarse esfuerzos para recordar la historia de la ciudad inundada en cenizas. Los esqueletos de algunos de sus habitantes fueron encontrados en 1980.

1 Pueblo Viejo de Belchite -- España

Belchite, el pueblo donde se libró una de las principales batallas de la Guerra Civil española, tenía unos 3.000 habitantes cuando fue ocupado por las tropas falangistas en 1936. Franco recuperó la ciudad a finales de ese año, y en 1937 lo convierte en el escenario de su toma de Zaragoza.

La guerra destruyó Belchite. Las autoridades exigieron que se evitara la reconstrucción o remodelación del pueblo, por lo que los habitantes constuyeron "el nuevo Belchite" al lado. Las ruinas del pueblo viejo son visitadas hoy por unas 10.000 personas al año.

a.
Ahora en portada