Los selectos vinos de los valles de Ourense

Visitando el Valle de Arnoia, en Ourense (Galicia), he llegado a las bodegas Eloi Lorenzo, una típica ‘adega de colleiteiro’. Así se denominan a un tipo de bodega gallega que se encuadran en la DO Ribeiro, que sólo producen vinos de cosecha propia y en ediciones limitadas.

Javier Monsalve, enólogo, viticultor y propietario de la bodega, apuesta por elaborar vinos con una selección de las mejores variedades autóctonas. Su objetivo es que cada añada sea mejor que la otra, que cada vez se consiga un vino más natural.

Cuando se prueban sus vinos, se descubre mucho de su filosofía de trabajo. En la visita, Monsalve me decía “el inicio de un gran vino es tener mucho cuidado con las viñas”. Y tiene razón. La finca donde cultiva tiene orientación al sur, rodeado de bosques que resguardan a los viñedos y el cercano río Arnoia garantiza humedad y frescor a las vides.

Uno de sus vinos es el Eloi Lorenzo, que lleva el nombre del médico que fundó la bodega. Su presentación refleja la naturalidad y generosidad del paisaje, transmitidos en una botella.

En boca se encuentra un vino meloso y elegante, que promete tener una evolución elegante en botella. De color dorado pálido, límpido y brillante, se percibe un gusto largo en boca y un postgusto persistente, algo tánico.

Este es un vino ideal para maridar sobre todo con productos del mar, carnes blancas, arroces, quesos, cocina japonesa, oriental, ceviche y pastas. El único punto en contra es que su limitada producción de 4.000 unidades lo hacen difícil de conseguir.

La DO Ribeiro es la más antigua de Galicia y una de las primeras de España, creada en 1932. Unas 107 bodegas comparten esta DO, que se encuentran en los valles de los ríos Miño, Avia y Arnoia, al noroeste de la provincia de Ourense.

En este territorio trabajan unos 5.800 viticultores, y muchos de ellos –englobados en 74 bodegas- cuentan con la denominación de colleiteiros, como el caso de Eloi Lorenzo, que sólo pueden producir hasta 60.000 unidades anuales.

Los vinos de esta DO provienen de las variedades blancas treixadura, loureiro, torrontés y lado; y las tintas sousón, brancellao y ferrón. Llama la atención, cuando se recorre la región, lo pequeñas que son las parcelas –varias de sólo una hectárea-, y también la producción que hay detrás de su vino tostado.

Este se realiza exclusivamente con uvas pasificadas por métodos tradicionales, a partir de la fermentación incompleta del mosto obtenido del prensado. Su delicado proceso de producción hace que el Tostado do Ribeiro tenga características únicas entre los vinos gallegos.

Para promocionar a este y otros productos, el Consejo Regulador ha emprendido una serie de campañas, como la renovación de la precinta que caratula a sus vinos, y un amplio trabajo de divulgación entre expertos y medios de comunicación.