Qantas supera el último obstáculo laboral para su vuelo de los récords

Qantas acordó con los pilotos las condiciones para operar la ruta de Londres a Sídney. Por la crisis del coronavirus la compra de los aviones está congelada

A las malas noticias por el recorte de frecuencias y la caída en ventas, Qantas tuvo un motivo para festejar: el acuerdo con los pilotos despejó el camino para avanzar en el proyecto de operar la ruta más larga del mundo.

La compañía informó que el 85% de los pilotos votaron a favor del acuerdo sindical con la aerolínea, que comprende los salarios de los tripulantes de vuelo, la cantidad de horas al frente de los mandos, las compensaciones y los turnos de descanso, entre otros puntos laborales.

La sombra de la amenaza

Hace un mes los directivos de Qantas se habían encontrado con un obstáculo inesperado por la resistencia de los pilotos a dar su aval al Proyecto Amanecer, que contempla realizar vuelos de 18 a 20 horas para unir a Sídney con Londres y Nueva York; y posiblemente también París y Fráncfort.

[Para leer más: Qantas da luz verde al vuelo más largo del mundo]

Así fue el vuelo sin escalas de Qantas entre Londres y Sídney. Foto: Qantas.

Así fue la ruta del vuelo de prueba de Qantas entre Londres y Sídney, en octubre de 2019. Foto: Qantas.

La respuesta de Alan Joyce fue una analogía de una opa hostil: instó a los pilotos a firmar el acuerdo o anunció que contrataría a nuevos tripulantes y los agruparía en un sindicato a medida para evitar problemas.

Cuando los pilotos de Qantas se resistieron a firmar las condiciones del Proyecto Amanecer los directivos amenazaron con contratar a nuevos pilotos solo para estos vuelos

No se sabe si los pilotos aceptaron bajo la sombra de esta amenaza o por las condiciones laborales propuestas, pero los 1.400 tripulantes afiliados a la AIPA (Asociación de pilotos australianos e internacionales, por sus siglas en inglés) dieron su visto bueno de manera abrumadora.

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El 85% de los pilotos dieron luz verde al Proyecto Amanecer. Foto: James D Morgan-Qantas

La compra de aviones tendrá que esperar

Sin embargo, desde el punto de vista técnico el coronavirus congeló los planes: Qantas se había comprometido a firmar la compra de 12 A350-1000 con Airbus para desarrollar el proyecto, pero la paralización de las operaciones aéreas llevó a postergar el acuerdo para diciembre de este año.

[Para leer más: Qantas congela la compra de los A350-1000 para el Proyecto Amanecer]

Aunque Qantas asegure que la hoja de ruta del Proyecto Amanecer mantiene su calendario, con esta postergación de nueve meses es difícil que lleguen a tiempo al 2023 para realizar el primer vuelo comercial entre la mayor ciudad de Australia y la capital británica.

“Cuando la crisis del coronavirus haya desaparecido, y sabemos que lo hará, volveremos nuestra atención al Proyecto Amanecer y a la compra de los A350”, dijo el representante de los pilotos de Qantas, Dick Tobiano, en un correo remitido a los tripulantes.

A350 1000 Foto Airbus

El A350-1000 es la aeronave elegida por Qantas para sus vuelos maratónicos. Foto: Airbus

Vuelos de categoría premium

Para estos vuelos Qantas propone que la cabina se divida en cuatro categorías: primera clase, business, económica premium y económica.

Qantas propone que sus vuelos sean más cómodos que los de la competencia, con una super primera clase de cuatro plazas y más espacio para las piernas en la categoría más básica

La más exclusiva de todas se promocionará como una “super primera clase”, con cuatro plazas en vez de las ocho habituales, y en las que se recrearán suites como en las aerolíneas más lujosas como Emirates o Singapore Airlines.

Todas las demás categorías tendrán mejoras con respecto a la competencia, con más espacio para las piernas y servicio de wifi de alta velocidad, detalles que harán más confortable un vuelo de tantas horas.

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