El Estado nacionaliza Malaysia Airlines tras los dos accidentes

Malasia prepara una reforma en profundidad para "reanimar" la aerolínea de referencia en el país; la operación mantiene suspendida la cotización de la compañía en la bolsa de Kuala Lumpur

Sobrevivir a dos accidentes como los que ha sufrido Malaysia Airlines era casi misión imposible. El Estado malasio ha decidido intervenir para frenar el hundimiento de la aerolínea, con problemas de financiación y con unos resultados en bolsa que auguraban lo peor. Sus acciones se depreciaron un 22,6% en el último año.

El plan de choque tiene dos fases. La primera ya está en marcha. El Estado, principal accionista, se hará con la totalidad de los títulos de la compañía a través de su brazo inversor, Khazanah Nasional Behard (Khazanah), en una operación valorada en 325 millones de euros. Resta que los accionistas minoritarios den el visto bueno a la compra.

La segunda fase del plan es reinventar la aerolínea, una vez perdida la confianza de los usuarios. El desgaste provocado por la desaparición del vuelo MH370 en marzo con 239 personas a bordo, y por el mísil que derribó al Boeing MH17 cuando sobrevolaba la zona de conflicto del este de Ucrania –298 personas a bordo– podría generar un quebranto económico para la compañía de 232 millones de euros, según los analistas.

Pero además está el daño a la imagen y a la confianza de los pasajeros. Contra ello quiere combatir Malasia. Khazanah indicó que con la operación pretende abordar una «completa reestructuración» de la aerolínea para revertir sus malos resultados, y satisfacer sus «necesidades sustanciales de financiación».

«Insistimos en que la reestructuración propuesta precisará necesariamente que todas las partes trabajen juntas para que se pueda llevar a cabo un ajuste completo de la aerolínea nacional en todos los aspectos relevantes», señaló el organismo gubernamental.

a.
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