El Gobierno prefiere vender Aena a los pequeños inversores

El tramo de capital destinado al núcleo duro de accionistas se reduce del 30 al 21%, con participaciones individuales que no podrán superar el 7%, y gana peso la salida a bolsa.

El peso de los futuros accionistas de referencia de Aena ha quedado reducido antes de que se plantee al detalle la privatización. En concreto, podrán comprar hasta un máximo del 21% del capital. Es decir, nueve puntos menos que los límites recogidos en el proyecto inicial.

El Consejo Consultivo de Privatizaciones (CCP) ha propuesto la reducción en un informe que actualiza el emitido en octubre de 2013, cuando se valoraba privatizar el 60%. El Gobierno recogerá el guante y ultimará la operación según estas recomendaciones.

Habrá espacio para un máximo de cuatro inversores institucionales que aspirarán a participaciones de entre el cinco y el 7% de Aena Aeropuertos, la filial del ente sometida a la privatización.
 

 
Los expertos creen que, con los cambios, las empresas harán mejores ofertas

 
El 28% restante, hasta el máximo del 49% que el Gobierno pretende colocar, se ofrecerá en bolsa mediante una oferta pública de venta (OPV), opción que gana peso y que está orientada al pequeño inversor.

El nuevo diseño ha eliminado la posibilidad que tenían los futuros accionistas de referencia de igualar el precio de la OPV si su oferta se quedaba por debajo. De esta manera se pretende que presenten precios máximos desde el principio.

El CCP también quiere estimular la competencia entre las corporaciones interesadas. Por esta razón la barrera de entrada será más estrecha. Para los expertos del Gobierno, la contracción del máximo del 60% al 49% a privatizar apenas afectará al interés del sector privado.

Aseguran en su informe que anteriormente el Estado también mantenía al menos el 40% de capital y seguiría siendo, con diferencia, el principal accionista de la compañía, a lo que se suma que tiene en su mano la regulación del sector aeroportuario.
 

 
El Estado mantendrá en Aena la presencia prevista en el proyecto original

 
“La influencia del Estado en la empresa hubiese sido también muy alta sin necesidad de contar con la mayoría. Desde este punto de vista, el impacto sobre la concurrencia de disminuir el porcentaje máximo de venta del 60% al 49% podría ser, en principio, no muy amplio”, señala el órgano.

Desde octubre de 2013, el CCP ha mantenido con Aena diferentes reuniones que han permitido que el ente incorpore sugerencias con anterioridad al dictamen actual, que se basa en el último borrador enviado el 17 de junio y dibuja los trazos finales de la privatización.

a.
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