La tragedia del MH17 aborta los planes de Putin sobre Ucrania

El presidente ruso encarga una investigación “clara” para aliviar la presión internacional sobre Moscú, que obligaría a una retirada “táctica” si concluye que los rebeldes abatieron el avión y actúan sin ningún tipo de control.

La postura intransigente del presidente ruso Vladimir Putin sobre Ucrania podría convertirle en un paria mundial si se esclarece que los culpables del derribo del vuelo MH17 de Malaysia Airlines con un misil tierra-aire y del asesinato de todas las personas que iban a bordo (295) son los separatistas prorrusos, que combaten contra Ucrania en una guerra de guerrillas en Donetsk, al este del país.

Por ahora, la amenaza de imponer más sanciones económicas cobra cuerpo. Estados Unidos (EEUU) podría elevarlas al nivel tres si Barack Obama acepta las recomendaciones de sus asesores más duros. Este escenario supondría el equivalente a la guerra fría. Como deriva del conflicto en Crimea, la comunidad internacional bloquea las cuentas del círculo de empresarios más próximo a Putin. En el futuro, los objetivos financieros serían los principales bancos y energéticas del país.

Los rebeldes sostienen aún, 24 horas después, su inocencia. El cruce de acusaciones sigue con Kiev: el gobierno ucraniano ha hecho pública una grabación de radio en la que, supuestamente, se escucha a varios líderes separatistas hablar sobre la tragedia. Esta filtración se une a la convicción de los servicios secretos estadounidenses de que Moscú facilita armamento pesado a las milicias.
 

 
La popularidad de Putin crece sin parar en Rusia desde que en marzo se anexionó Crimea

 
“Si finalmente se logran evidencias sólidas de que son los rebeldes los culpables y que el arma que usaron se construyó en Rusia, habrá una fuerte presión sobre Putin para que enfríe las pretensiones de los prorrusos”, asegura la analista del Centro Carnegie (Moscú), Masha Lipman.

La situación obligaría a una retirada “táctica” del ejército ruso, que se agolpa en las fronteras con Ucrania. En todo caso, la tragedia debería cambiar “la manera que las naciones, y no sólo Occidente, abordan el conflicto entre ambos países así como su papel en él”.

LEA TAMBIÉN: Kiev asegura que el sistema de misiles que habrían utilizado los rebeldes ya está en Rusia

La popularidad de Putin, que niega las acusaciones sobre su responsabilidad indirecta en la masacre del MH17, crece sin parar en Rusia. Desde que en marzo se anexionó Crimea, sus compatriotas le conceden las notas más altas de aceptación. La fortaleza interna le ha servido para mantenerse firme contra las sanciones económicas. Pero la masacre de Malaysia Airlines sería demasiado, incluso para él.

Quizá por ello también apuesta por una investigación clara de lo ocurrido. En la reunión de urgencia del Ejecutivo celebrada ayer tras al derribo, Putin ordenó a todos sus organismos –militares y civiles— “investigar este crimen”, según la transcripción a la que ha tenido acceso la agencia estadounidense Bloomberg. “Este tipo de situaciones son absolutamente inaceptables”, remató, según las mismas fuentes.

La inteligencia rusa trabajará con dos hipótesis: la primera y más probable es que a los separatistas prorrusos de Ucrania se les fuera la mano. Putin podría tener que intervenir contra los rebeldes si se da cuenta de que él mismo ha alimentado “una fuerza incontrolable”, explica a Reuters la directora del centro de estudios de Rusia y Europa del Este de la Universidad de Georgetown (EEUU), Angela Stent.
 

 
Moscú filtra que el misil habría sido disparado por Kiev para intentar derribar el avión de Putin

 
La segunda línea de trabajo de los servicios secretos, que resultaría la más favorable para Moscú, intentará reunir pruebas de que fue el gobierno ucraniano el culpable de la masacre de civiles. Una filtración de Interfax, que cita a un alto funcionario moscovita, da cuenta de que el misil habría sido disparado por Kiev para intentar derribar el avión de Putin, que ayer sobrevolaba la misma zona cuando volvía de un viaje oficial a América Latina.

Un portavoz del Kremlin se ha negado a hacer comentarios esta mañana sobre la hipótesis. Entretanto, desde Ámsterdam, ciudad de origen del vuelo abatido, el gobierno holandés ha confirmado una tragedia nacional. A bordo del MH17 viajaban 154 ciudadanos del país noreupeo. Al menos también han muerto cuatro franceses, varios australianos, ingleses, belgas, canadienses y filipinos.

LEA TAMBIÉN: Recuperados 181 cadáveres en el lugar donde se estrelló el avión

Los gobiernos afectados intercambian información para identificar las víctimas y claman contra Putin: “Sería un buen momento para que cambiara su estrategia sobre Ucrania”, dijo el ministro de Exteriores francés, Laurent Fabius.

a.
Ahora en portada