Soriano recurrió al mayor accionista de NH para salvar a Spanair

El ex presidente de la aerolínea revela que buscó un plan B con el grupo chino HNA por las dudas que presentaba Qatar y asegura que la Generalitat garantizó fondos hasta diciembre de 2011.

El ex presidente de la quebrada Spanair, Ferran Soriano, se ha escudado en el acuerdo de financiación que la Generalitat mantenía con Spanair para defender el retraso en la declaración de quiebra de la compañía.

Según su relato, se negoció hasta el último momento con Qatar Airways. No obstante, la aerolínea del emirato expresó dudas al ver que la operación podía dañar su reputación. Bruselas planteó que la compañía resultante de la fusión debía devolver ayudas públicas.

La aerolínea española recibió un total de 200 millones de euros provenientes de las administraciones.
 

 
Qatar Airways abandonó por la posibilidad de tener que devolver 200 millones en ayudas

 
Frente a este escenario, Spanair abrió negociaciones con el grupo chino HNA. Los principales accionistas de NH Hotel Group se constituyeron en un plan B por si Qatar Airways finalmente arrojaba la toalla. No obstante, la Generalitat, según ha explicado Soriano, no tomó en serio la apuesta. Tras romperse las negociaciones con Qatar, la administración catalana cerró el grifo.

El ex presidente de la firma ha asegurado, en la primera jornada del juicio por este asunto, que conocía las «tensiones de tesorería». No obstante, también ha señalado que el Govern había garantizado fondos hasta diciembre de 2011 con el objetivo de sellar un acuerdo con un socio inversor.

«Teníamos confianza segura de que se iba a financiar hasta lograr el acuerdo con Qatar Airways», ha asegurado ante el juez.
 

 
Soriano y el consejo de Spanair se enfrentan a una condena de 72 millones en sanciones

 
Soriano, como el resto de consejo de administración, está acusado de retrasar la declaración de concurso de acreedores al menos cinco meses. La Fiscalía, basada en el informe de la administración concursal, indica que la firma debió ir a quiebra en junio de 2011 y no el 30 de enero de 2012, una vez ya había cesado operaciones pocos días antes. Por esta dilación, les exige 72 millones de euros, además de pedir su inhabilitación por dos años.

El actual director general del Manchester City ha explicado que el consejo trató la declaración de concurso de acreedores en mayo de 2011. No obstante, Avançsa –vehículo de inversión de la Generalitat– financió a la aerolínea con 56 millones más.

Soriano ha asegurado al juez que Spanair contaba con financiación «a primer requerimiento» por parte del Govern. En este sentido, ha señalado que la aerolínea mantuvo sus compromisos al día hasta finales de 2011.

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