Abertis, la más expuesta a nuevas expropiaciones de Morales

Gestiona los tres principales aeropuertos de Bolivia, cuyo gobierno ha amagado con la nacionalización

La expropiación de las cuatro filiales de Iberdrola en Bolivia ha vuelto a poner en alerta a las multinacionales con presencia en el país sudamericano.

Abertis es la empresa más expuesta a próximas nacionalizaciones. Controla los tres aeropuertos principales del país. La sombra de la expropiación ya los ha sobrevolado en varias ocasiones. Junto a AENA, la compañía dirigida por Francisco Reynés gestiona los aeródromos de La Paz, Cochabamba y Santa Cruz.

La empresa Servicios de Aeropertos Bolivianos (Sabsa) es propiedad de TBI, la filial de Abertis (90%) y AENA (10%) con la que gestiona además otros aeropuertos en Reino Unido.

Intentos previos

En 2010 hubo varias informaciones sobre la posibilidad de que el Gobierno de Evo Morales se hiciera con la gestión de las instalaciones. El mismo ejecutivo se encargó de desvanecer las informaciones tras negociar con la filial de La Caixa.
“Somos conscientes de que puede pasar”, aseguran desde la concesionaria “pero siempre nos han dicho que no”. Abertis posee la concesión de los tres aeropuertos hasta 2022, pero está tranquila ya que el negocio boliviano no supone ni medio punto porcentual del total del grupo de infraestructuras.

Además, Abertis, que ha estado en los últimos años en conversaciones con el Gobierno de Morales, ha cumplido las inversiones a rajatabla además de mejorar los sueldos en la compañía. Y eso, sin poder aumentar las tarifas.

Repsol, estratégica

España es el segundo inversor en Bolivia, principalmente por la petrolera Repsol, que posee importantes activos de hidrocarburos, sobre todo, gas natural. La petrolera es un socio estratégico de Morales.

El pasado mayo, en plena expropiación de la filial boliviana de Red Eléctrica, el presidente de Bolivia ratificó a Repsol como el principal inversor extranjero del país en materia de hidrocarburos.

Promesas de Brufau

En la puesta en marcha del campo Margarita, Morales dijo en presencia de Antoni Brufau que “reconozco y reconocemos el liderazgo de Repsol, una de las empresas internacionales más grandes de todo el mundo, y su inversión siempre será respetada como socio”.

En mayo Brufau prometió desembolsar 500 millones de euros (660 millones de dólares) en los próximos años en lo que será la segunda fase del proyecto de Margarita.

Banca

Caso parecido le ocurre a BBVA que está presente en Bolivia de forma residual. El grupo que preside Francisco González administra una serie de fondos de pensiones que prácticamente aportan negocio al banco.

BBVA no hace banca comercial y el beneficio atribuido de la entidad en Bolivia supone 1,5 millones de euros, según los datos de 2011.

Editoriales

Otras empresas como Santillana Ediciones (Grupo Prisa) y la Unión Española de Explosivos, poseen negocios en Bolivia desde hace muchos años.

Pero por distintas causas no estarían tampoco en el objetivo del Gobierno de Bolivia, que quiere controlar los recursos del país siempre y cuando no esté conforme con las inversiones privadas.

a.
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