El 94% del empleo que genera el turismo es “trabajo basura”
Al menos 30.000 de los contratos que se firmaron durante el primer semestre son temporales y de tiempo parcial; CCOO denuncia que estas condiciones “degradan a los profesionales” y rozan el fraude de ley.
El sector turístico español finalizará otro año de récord pero se mostrará impotente, nuevamente, para generar puestos de trabajo estable. Tampoco romperá la racha que, desde 2011, reduce, temporada tras temporada, los salarios.
La situación de deterioro ha llegado a tal extremo que el Instituto Nacional de Estadística certifica que no hay actividad económica en el país que pague peor a sus profesionales, a pesar de ser la que más crece en términos comparables de PIB ( 3,1%).
El paradigma perdurará, según las previsiones de los sindicatos, que se echan las manos a la cabeza tras conocer la evolución de lo que se ha consumido de 2014. El primer semestre del año ha extendido el acta que recoge las condiciones laborales más débiles jamás registradas.
El 94% de los puestos netos creados son contratos temporales. Es decir, el 6% es indefinido.
Además, del grupo de 56.000 nuevas altas temporales, prácticamente 30.000 son a tiempo parcial, una combinación que para los representantes de los trabajadores incurre en fraude de ley.
El secretario general de la federación de comercio y turismo en Andalucía de CCOO, Gonzalo Fuentes, pone en contexto esta realidad. “Las pernoctaciones triplican el empleo”, explica. “El aumento de la carga de trabajo ha crecido sin proporción”. En turismo parece llover sobre mojado.
El año anterior fue una temporada de grandes expedientes de regulación de empleo. En la actual, la reducción de las plantillas continúa y las condiciones laborales empeoran, a juicio de CCOO.
Sobre cómo corregir la situación hay cierta coincidencia con las patronales. Los sueldos y la calidad de los puestos de trabajo remontarán cuando la industria gane calidad.
El turismo apenas ha crecido 2,4 puntos netos desde 2000 aunque el año pasado batió todos los récords de visitas, con 60 millones de turistas internacionales y este año podrían alcanzarse los 70.
En términos de gasto, los viajeros inyectan a los negocios 5,4 puntos menos que al inicio de siglo. Los niveles de rentabilidad son reducidos.
Para el director de estudios de Exceltur, Óscar Perelli, el problema retributivo se superará cuando los destinos maduros sean capaces de mejorar el producto y, por tanto, lograr más ingresos.
La modernización pasa necesariamente, según el lobby empresarial, por la luz verde a incentivos para las empresas que inviertan en este sentido. Ésos ya deberían incluirse en la próxima reforma fiscal.
CCOO entiende que, por ahora, el turismo sólo atrae profesionales no cualificados, que perjudican el objetivo de lograr un servicio de calidad con capacidad para fidelizar y por tanto de mejorar las condiciones laborales.
