Salvar al turista español

El sector quiere recuperar la confianza del consumidor y desestacionalizar las vacaciones para mantener el mercado doméstico

España, país con una población de 47 millones de habitantes, recibió 57,9 millones de turistas extranjeros en 2012. Significa el 3% más que un año antes, a un paso de alcanzar su máximo histórico. En total, los visitantes de otros países dejaron cerca de 55.777 millones de euros por estos lares, el 5,9% más que en 2011. 

Todo ello son cifras conocidas que no por ello dejan de ser impresionantes. No obstante, en el sector existen sombras. El mercado nacional prosigue su desplome. El informe Familitur muestra la caída del 1,3% en cuanto a viajes de los ciudadanos españoles (un total, 158,7 millones de viajes) en 2012 y confirma la tendencia en el primer semestre el año. “La primera premisa para ser una potencia, es tener un mercado doméstico sólido”, explica el director de Turespaña, Manuel Butler a 02b.com. El alto cargo del Gobierno alerta de que la buena marcha del turismo internacional es suficiente para amortiguar el golpe aunque en ningún caso se puede bajar la guardia.

Impacto empresarial

“La caída del mercado nacional afecta de forma desigual a las compañías”, dice Butler. La lista de perjudicados apunta a todas las ramas: aerolíneas, navieras u hoteles, entre otros. Sin embargo, las agencias de viaje son las que se llevan la peor parte. “El sector estaba sobredimensionado y por eso ha sufrido mucho. España tenía más agencias de viaje que Alemania”, afirma. En datos del año pasado de la compañía Amadeus, principal proveedor tecnológico de este tipo de negocios, la media española (1,29 agencias por 10.000 habitantes) se empieza a acercar a la europea (una agencia cada 10.000 habitantes) tras los cientos de cierres.

El resto del sector vive enfocado al mercado internacional. Las aerolíneas centran sus esfuerzos en ampliar su volumen de negocio en el extranjero para compensar la caída de la demanda española. Ese es el caso de Vueling, que poco a poco ha reorientado su negocio y ya vende más del 35% de sus pasajes fuera de España. O el de Volotea, compañía que aspiraba a ser el referente de las ciudades medianas españolas y ha emigrado a otros países. AENA confirma la tendencia. El operador ha perdido este año alrededor del 5% de pasajeros, hasta los 194, 2 millones, en gran medida por culpa del lastre que supone el mercado doméstico.

Los hoteles son otra historia. La caída de demanda por parte del turista español afecta principalmente a establecimientos urbanos, que crecieron como setas en época de bonanza económica, y los hoteles de interior (principalmente, los que se encuentran al norte del país). “Quien tiene todos sus hoteles en Barcelona es un genio. Quien los tiene en la capital catalana y en Madrid se puede dar con un canto en los dientes. Todo lo demás, juega en contra”, afirman fuentes del sector. El informe Familtur de cierre del 2012 muestra un descenso de las pernoctaciones de españoles en hoteles de alrededor del 10%.

¿Se ha tocado fondo?

Butler asegura que la caída del mercado nacional ha tocado fondo. “Tras cinco años de gran contracción del consumo, estamos cerca del cambio de tendencia”, indica.

Su opinión coincide con la del ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, quien la semana pasada aseguró que prevé una futura recuperación del mercado turístico nacional, ya que 2013 será “el último año de la recesión en España”.

Reactivar el mercado nacional

Pese a estas previsiones optimistas, existe la duda de cómo se debe llevar a cabo esa recuperación. Butler asegura que “es básico recuperar la confianza del consumidor”. Eso se puede lograr trabajando en desestacionalizar las vacaciones de los turistas españoles para lograr, entre otras cosas, una ocupación hotelera más regular.

Además, el director de Turespaña apunta como factor clave para relanzar el mercado nacional (aunque también el internacional) es la apuesta cultural. “Tenemos un modelo de sol y playa de referencia. No obstante, esa otra faceta aún está en vías de mejora”, dice. En porcentajes, el viaje cultural tan sólo representa el 15 o el 20% del total, asevera.

“Hay que potenciar las escapadas durante todo el año”, indica el director del Salón Internacional del Turismo de Catalunya, Raimón Martínez Fraile. En este sentido, el experto indica que España no puede crecer mucho más explotando las mismas técnicas que la han consolidado como potencia turística y apuesta por la diversificación vacacional.

No obstante, en Catalunya existe división de opiniones. Sin ir más lejos, el consorcio Turisme de Barcelona ha avisado recientemente que los objetivos de la ciudad no pasan por el mercado doméstico

a.
Ahora en portada