Cuidado: en estos sitios las selfies son ilegales
En algunos de los puntos turísticos más famosos del mundo está prohibido realizarse fotos con el móvil. Y estas son las razones
La pasión por las selfies tiene consecuencias insospechadas: además del trágico saldo de los accidentes buscando la foto perfecta hay muchos sitios donde sonreír delante del móvil está prohibido y puede implicar multas o un problema legal considerable.
En muchos casos la prohibición alcanza a centros culturales, de arte o museos donde hay una política de derechos de autor que impide realizar fotografías.
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En otros es por el respeto a las zonas consideradas sagradas, y tampoco faltan los casos en que las razones de seguridad priman sobre cualquier intento de sacar el móvil.
Respeto a los lugares sagrados
El respeto al culto es uno de los motivos por el que no solo las selfies, sino que cualquier tipo de fotografía está prohibida en la Abadía de Westminster, en Londres. Lo que se busca con esta medida, indican las normativas del templo anglicano, es “mantener el espíritu íntimo y sagrado” del lugar.
En La Meca está prohibido realizar fotografías dentro y fuera del recinto por respeto a los peregrinos
Al menos en Westminster sí se pueden realizar fotografías a la distancia de la abadía, pero las selfies no están autorizadas ni dentro ni fuera de La Meca, el principal lugar sagrado para el Islam.
En La Meca está prohibido realizar fotografías por respeto a los peregrinos.
La razón es preservar el respeto de los peregrinos, que cada año viajan realizan siete vueltas alrededor de la Kaaba, el recinto bajo túnicas negras donde hay una piedra sagrada.
El mausoleo más visitado
En el Taj Mahal se considera que las selfies son una falta de respeto a la memoria de los muertos. Cabe recordar que este es un mausoleo levantado por un príncipe mongol en honor a su esposa, que es visitado por ocho millones de personas al año.
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A pesar de este pedido de respeto, son pocos los viajeros que lo cumplen y casi todo se retratan frente a las cúpulas de mármol blanco.
Razones de exclusividad
En la Capilla Sixtina también está prohibido realizarse selfies. La medida proviene desde 1980, y se pensaba que era porque los flashes podían arruinar los trabajos de restauración de las pinturas de Miguel Ángel.
La razón es otra: para poder encarar las obras la corporación de medio de Japón Nippon TV aportó 4,2 millones de dólares a cambio de tener la exclusividad en las fotografías y videos que se hacen en la capilla.
Al momento en que uno saque el móvil y pretenda realizar una foto, enseguida tendrá a un vigilante de seguridad exigiendo que lo guarde.
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En la Capilla Sixtina una compañía tiene los derechos para realizar fotos de su interior.
Otra obra cumbre de Miguel Ángel, el David, también cae bajo la prohibición de ser retratado. Entre los motivos está que la famosa escultura o sus partes es usada en calendarios, delantales y hasta calzoncillos sin pagar derechos, lo que enfurece a las autoridades de la Galería de la Academia de Florencia donde está expuesto.
Si alguien quiere quitarse las ganas de retratarse con el famoso guerrero judío puede hacerlo al lado de la copia en la entrada del Palacio Viejo, que nadie le pondrá ningún problema.
Peligro, selfie en marcha
Entre 2011 y 2017 más de 260 personas murieron cuando pretendían realizar una selfie. Muchos casos se dieron en el frente marítimo de Mumbai, razón por la que las autoridades decidieron cortar el problema de raíz y prohibir los autorretratos con el móvil.
Más de 260 personas murieron entre 2011 y 2017 al realizarse una selfie
Los acantilados de Irlanda también han sido testigos de alguna muerte accidental por turistas que se acercaron demasiado al borde para obtener la mejor imagen. Por ello el gobierno propuso instalar asientos donde los visitantes puedan realizar excelentes fotografías sin tener que poner su vida en peligro.
Palos prohibidos
Más que retratarse con el teléfono, en muchos museos lo que está prohibido es usar el famoso palo de selfie, por el riesgo que supone para las obras expuestas. Es que nunca falta alguien que lo extiende y amenaza con golpear un jarrón, rayar un lienzo o impactar en un visitante.
Muchos viajeros arriesgan su vida por la foto perfecta.
Esta medida se aplica en museos y centros culturales e históricos como el Thyssen de Madrid, el de Arte Moderno de Nueva York, el Coliseo de Roma, el Guggenheim de Nueva York, el Palacio de Versalles, la Galería Nacional de Londres y la Ciudad Prohibida de Pekín.
Juan Pedro Chuet-Missé es redactor de Cerodosbé/Tendencias desde 2017, y del Grupo Economía Digital desde 2015. Especialista en destinos fuera de lo común, cultura, estilo de vida, viajes y todas aquellas historias que vale la pena contar.
