Los trucos favoritos de los carteristas para robar a los turistas

En el verano los hurtos se disparan, porque los ladrones actúan en grandes eventos como el actual San Fermín, o aprovechan las distracciones de los turistas en las playas o en los aeropuertos

San Fermín es un festival para turistas y pamploneses. Pero también para los carteristas, que aprovechan las multitudes, embriagadas de alegría, bailes y con una generosa cuota de alcohol, para meter mano en bolsillos y mochilas y robar las carteras y móviles.

En la fiesta más famosa de Navarra, estos días se concentra el 36% de los hurtos que se registran en un año. Pero no es el único caso de que las multitudes atraigan a los ladrones: en Zaragoza, para las Fiestas del Pilar, se sucede el 26% de los robos. O en Canarias o Baleares, uno de cada tres robos ocurre durante los meses del verano.

Pero la comunidad autónoma con más hurtos es Cataluña: allí se producen el 24% de todos los hurtos denunciados en España. Las Ramblas de Barcelona, por ejemplo, es la calle que tiene la mayor cantidad de denuncias de toda la ciudad. Y en el ranking de robos, le siguen Madrid (17%), Andalucía (15%), la Comunidad Valenciana (12%) y Baleares (con un 6%), según informan en CPP, una empresa protectora de tarjetas.

El decálogo de los carteristas

¿Cómo evitar los robos? Pues evitar mostrar una conducta errática, tener cuidado con el contacto con desconocidos, no llevar la cartera en el bolsillo trasero, mantener los bolsos y mochilas bien cerrados, tomar sólo taxis autorizados, y si se produce un choque con una persona, rápidamente verificar que se conserven todos los elementos de valor.

Hay diversos trucos de los ladrones, y estas son sus zonas favoritas de actuación:

Estaciones de buses, metro y aeropuertos: cuidado con los empujones al entrar al bus o al metro, y tener siempre las maletas a mano.

Al subir escaleras con maletas: es probable que alguien se acerque a ayudar, pero quizás empuje un poco y se alce con el móvil o la cartera

En un bar de copas: tanto a la salida como en el interior, la combinación de distracción con los sentidos aletargados por el alcohol pueden jugar en contra.

En la recepción de un hotel: mientras el pasajero deja sus maletas para hacer el check in, el carterista se acerca como un huésped y puede llevarse el equipaje rápidamente.

En la playa: en esos instantes que el turista se da un chapuzón o se pone a jugar con las paletas, un ladrón puede hacer desaparecer el bolso o la mochila en segundos.

La foto del viaje: en puntos emblemáticos, donde todos quieren hacerse un selfie, es aprovechado para sustraer carteras.

El falso turista despistado: hay ladrones que se hacen pasar por turistas despistados, despliegan un mapa grande para preguntar por una calle y un cómplice aprovecha la distracción para llevarse algún objeto de valor.

Qué hacer en caso de robo

Los turistas son las víctimas favoritas porque pasean relajados y sin precauciones, son más abiertos a establecer contacto con desconocidos, generalmente viajan con dinero en sus carteras, y sobre todo, porque muy pocos denuncian el robo o no pueden presentarse en la vista judicial.

En caso de sufrir un robo, lo primero que se debe hacer es bloquear las tarjetas bancarias y las cuentas relacionadas con el teléfono, como los servicios de banca móvil. Luego, hay que acudir a una comisaría y tramitar la denuncia. Este paso es clave porque permitirá gestionar los duplicados de los documentos (DNI, pasaporte, registro de conducir), y se podrá reclamar ante las compañías en caso de que los ladrones hayan realizado gastos con las tarjetas.

 

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